La Carrera del Potencial
Cada vez que nos embarcamos en el desafío de buscar personas que cuenten con la capacidad de desempeñar un determinado puesto de trabajo y además, de alinearse a una determinada cultura organizacional, se abren varios interrogantes los cuales debemos resolver de alguna forma si queremos asegurarnos de que la persona que finalmente decidamos que ocupe ese puesto tenga éxito en su desempeño y esté a la altura de lo que el puesto requiere.
Así, podemos tomar como base algunos conceptos que inmediatamente se nos vienen a la mente a los profesionales de recursos humanos. Conceptos como Talento, Potencial, Capacidad. Vale definir entonces estos conceptos:
- Talento: Se refiere a las habilidades, capacidades y aptitudes innatas o adquiridas que posee un individuo para desempeñar determinadas tareas de manera excepcional.
- Capacidad: Es la habilidad demostrada por una persona para llevar a cabo con éxito las tareas asignadas en un puesto de trabajo específico, basada en su conocimiento, experiencia y competencias.
- Potencial: El concepto de potencial humano ha sido objeto de reflexión y estudio a lo largo de la historia, pero la teoría de Elliot Jaques aporta una perspectiva única y profunda sobre este tema.
Jaques, psicoanalista y teórico, desarrolló la teoría del desarrollo cognitivo y la carrera profesional, proporcionando una base sólida para entender cómo las personas desarrollan su potencial a lo largo de sus vidas laborales.
Elliot Jaques sostiene que el potencial humano no es una entidad estática, sino un proceso dinámico que evoluciona a medida que las personas avanzan en sus carreras. Para Jaques, el potencial humano se vincula estrechamente con el desarrollo cognitivo y la capacidad de asumir roles cada vez más complejos y desafiantes en el ámbito laboral.
Así, cada individuo tiene un nivel de complejidad cognitiva, que determina su capacidad para manejar la incertidumbre, la ambigüedad y la complejidad en el trabajo.
Jaques clasifica estos niveles en términos de “estratos”, definiendo las habilidades requeridas para roles específicos en cada estrato.
La carrera del potencial humano, entonces, implica la progresión a través de estos estratos a medida que se desarrolla la capacidad cognitiva.
Se nos vienen preguntas como ¿Qué capacidad potencial debe tener la persona para desempeñar el puesto? ¿Cómo podemos medir la capacidad requerida para cada puesto y la capacidad potencial de la persona que entendemos podría ocupar la posición?
Hasta ahora, todas las técnicas de selección, test proyectivos, de competencias conductuales, cuestionarios de evaluación, etc. que conocemos miden de alguna forma cuáles son las habilidades que actualmente tiene la persona. Pero no nos hablan de su capacidad para desarrollar otras habilidades – especialmente las gerenciales- en el futuro.
El método de Elliot Jaques es el único método comprobado que permite medir la capacidad potencial en una escala de hasta 10 años.
Medición del potencial: La identificación del potencial en los empleados no sólo requiere evaluar sus habilidades actuales, sino también su capacidad para crecer y desarrollarse en roles más complejos. Implementar procesos de evaluación del potencial, como evaluaciones de desempeño, pruebas psicométricas y evaluaciones de competencias, puede ser fundamental para identificar y desarrollar el talento dentro de la organización.
Desarrollo del potencial: Una vez identificado el potencial en los empleados, es crucial proporcionarles oportunidades de desarrollo personalizado que les permitan alcanzar su máximo rendimiento. Esto puede incluir programas de capacitación, mentoría, asignación de proyectos desafiantes y oportunidades de crecimiento profesional. Al invertir en el desarrollo del potencial humano, las organizaciones pueden cultivar un talento sólido y preparado para enfrentar los desafíos futuros.
Cultura organizacional: La cultura de una organización juega un papel fundamental en el desarrollo del potencial humano. Una cultura que fomente la colaboración, la innovación y el aprendizaje continuo puede motivar a los empleados a alcanzar su máximo potencial. Además, una cultura inclusiva y de apoyo puede crear un entorno donde todos los empleados se sientan valorados y empoderados para contribuir al éxito de la organización.
Retención de talento: Finalmente, retener el talento identificado y desarrollado es esencial para el éxito a largo plazo de la organización. Ofrecer oportunidades de crecimiento y desarrollo, reconocimiento y recompensas, y un ambiente de trabajo positivo y gratificante puede ayudar a mantener a los empleados comprometidos y motivados a permanecer en la organización.
En definitiva, la teoría de Elliot Jaques ofrece una visión de la carrera del potencial humano centrada en el desarrollo cognitivo y la progresión a través de estratos de complejidad en roles laborales. Al comprender y aplicar estos conceptos, las organizaciones y los individuos pueden fomentar un crecimiento significativo y sostenible, maximizando el potencial humano en el mundo laboral en constante cambio.